Este nuevo diseño lo hace más seguro, robusto y fácil de mantener; permite ver el flujo de CO2 que estamos añadiendo al acuario y así poder controlar el ritmo con el que aditamos el gas.
Además tiene una junta que ajusta perfectamente y evita fugas, roscas para el ajuste de los tubos y un material muy robusto para aguantar bien la presión.
Viene perfectamente equipado con ventosas o tornillos para el soporte del cilindro, por lo que se puede colocar en cualquier sitio, ya sea a la vista o no porque su estética también lo permite.