Detalles
Un arma en toda regla contra la turbidez del agua, casi de cualquier origen. Tarda unas horas y deja el agua lechosa un rato, después empieza a aclararse de manera súper eficaz.
Se basa en floculantes con lo que uno o dos días después se recomienda cambiar el perlón (o el material de filtración mecánica que se use en cada caso) ya que ahí se almacenará más suciedad de la habitual.
Existe un “potenciador” de esta claridad que es usarlo junto al Brighty K de ADA, lo que termina de aclarar mientras abonamos nuestras plantas con potasio.
Una pulsación cada 10 litros de agua.